La librería Finestres apuesta por el cómic para adultos en catalán

Nueva apuesta cultural de la librería Finestres. El proyecto impulsado por el empresario Sergi Ferrer-Salat —propietario de los laboratorios farmacéuticos Ferrer— extiende su ámbito de actuación y pone el foco en el cómic para adultos en catalán, un nicho de mercado sin la oferta suficiente, con la voluntad de llegar a aquellos lectores que están acostumbrados a leer novelas gráficas en castellano porque no las encuentran en catalán. La respuesta para cubrir este vacío tendrá una triple aproximación, con la creación de una editorial y un premio literario especializados en este tipo de obras y la apertura de un segundo local, ubicado en la calle Diputació, justo delante del actual.

“El objetivo es normalizar la presencia del cómic para adultos en catalán”, explica Montserrat Terrones, la encargada de dirigir esta nueva iniciativa. Para hacerlo, la estrategia de la editorial Finestres consistirá en la publicación de diez obras cada año, que se dividirán entre novedades internacionales y, en menor proporción, obras de referencia hasta ahora inexistentes en catalán. Se estrenará este miércoles con los títulos L’accident de caça, de Landis Blair y David L. Carlson, recientemente premiado en el Festival International de la Bande Dessinée de Angulema, el más prestigioso de Europa, e Intrèpides, de Pénélope Bagieu, un superventas con más de un millón de ejemplares vendidos.

Dentro de unos años, la nueva editorial publicará obras propias, tanto de autores que las creen en catalán como de los ganadores de su premio literario. En este sentido, el premio Finestres de Cómic en catalán estará dirigido a creadores que presenten un proyecto de novela gráfica en lengua catalana. El premio para el ganador será de 25.000 euros, la misma cifra que la de los otros galardones que impulsa la librería, especializados en obras de ensayo y narrativa, que cuentan con modalidades en catalán y castellano.

Esta apuesta se complementará con la creación de un espacio propio en la librería Finestres, que pasará a tener dos locales a principios del año que viene. El nuevo establecimiento estará especializado en el arte, con un protagonismo especial de los cómics, pero incluyendo también obras sobre artes clásicas, danza, música y cine. Contará con 14.000 referencias y 20.000 volúmenes en diferentes idiomas.

El futuro local no se parecerá al principal, inaugurado en abril con el silencio como característica principal, y tendrá “un look más industrial”, señala la responsable de compras de la librería, Mireya Valencia. Con las obras todavía en marcha, se ha concebido como un espacio diáfano con elementos como columnas finas y suelo de cemento. Tendrá un espacio de gradas para presentaciones y actividades culturales. “No sabemos si conseguiremos darle un aspecto gamberro, pero lo intentaremos”, remarca Valencia. Tendrá una superficie total de 215 metros cuadrados, más pequeña que la del establecimiento principal, con 800 metros cuadrados.