Más de 1.100 establecimientos barceloneses usan Too Good To Go

El derroche alimentario es una de las grandes lacras sociales que quedan por resolver. Cada año, un tercio de la producción mundial de alimentos se pierde en todo el mundo. Solo en España, esta cifra llega a los casi ocho millones de toneladas anuales. Iniciativas como Too Good To Go lo quieren revertir.

Esta empresa danesa permite “salvar” a un precio reducido el excedente de comida que generan diariamente restaurantes, supermercados y panaderías, evitando así que se tire a la basura. Sus packs sorpresa cuestan entre dos y cinco euros, y contienen siempre un poco de todo.

Too Good To Go funciona a través de una aplicación móvil que conecta a los locales con los usuarios. En Barcelona, más de 1.100 establecimientos se han dado de alta, como Ametller Origen, El Pagès Creative Chicken, Cal Fruitós, Llegums Roca, Sopa o El Fornet. Desde su entrada en funcionamiento en la capital catalana, esta compañía ha vendido más de 680.000 paquetes de comida sobrante —pero en buen estado—, cifra que equivale a 680 toneladas de alimentos aprovechados.

Esta iniciativa no solo está disponible en Barcelona, sino que ya se ha extendido por toda Catalunya, con más de 2.200 establecimientos registrados y 1,2 millones de packs de comida comprados —1.200 toneladas—. Básicamente, está presente en los grandes núcleos urbanos, pero también se puede encontrar en pueblos y ciudades más pequeñas de todo el territorio.

Actualmente, Too Good To Go llega a 14 países europeos y Estados Unidos. Cuenta con más de 38 millones de usuarios y más de 90.000 establecimientos asociados. El cómputo global de alimentos que ha vendido sube hasta los 70 millones de paquetes sorpresa.