Hace unos años tomé un café en casa del publicista Toni Segarra acompañado por el creativo Edu Polo coincidiendo con la publicación de su obra conjunta titulada La Interrupción (Deusto, 2022). “Los publicistas nos avergonzamos de la publicidad que es una herramienta de marketing para que la gente conozca y compre una marca y un producto. La creatividad publicitaria es pensar cómo decir lo que hay que decir”, reflexionaba Segarra. Casualidad o no, puso un spot de televisión o el discurso de un CEO ante la junta general de accionistas como ejemplos de publicidad.
El nombre de Toni Segarra quizás les suena de anuncios como Bienvenido a la República Independiente de tu casa de Ikea; ¿Te gusta conducir? o Be water, my friend de BMW, o las famosas conversaciones del Banco Sabadell. De hecho, Segarra explicaba en octubre de 2019 en el auditorio del Banco Sabadell que “cada vez somos más conscientes de que consumir es un acto político. La gente piensa qué herramienta tiene para influir en la empresa y es mucho mayor que votar cada cuatro años en política. Ir al supermercado es votar”. E ir al banco también es votar.
Toni Segarra es uno de los ideólogos de la campaña De accionistas del BBVA para accionistas del Sabadell imaginándose de forma sugerente como podría ser este nuevo banco resultante de la fusión. Personal, sinergias, tamaño, competitividad, especialización en IA o ciberseguridad, etc. Seguramente ya han escuchado por la televisión casi todos los argumentos a favor de la OPA.
Y también en contra. El Banco Sabadell ha aprovechado la ocasión para “poner los puntos sobre las íes” —y nunca mejor dicho— alertando “de buen rollo” que “la operación es una OPA hostil y punto” y que “todavía todo es posible”. Buen rollo por lo que pueda pasar y el todavía por lo que podría ser, pero que quizás es un poco menos posible que ayer. La palabra Big (grande) en mayúsculas de su nueva campaña publicitaria orquestada por Oriol Villar es un mensaje directo a los smalls (pequeños), es decir, a la financiación de las pymes y los pequeños accionistas. Y es que tal como dice su claim: “Poder elegir es tu poder”. La disputa por el relato de esta OPA que pronto celebrará un año de su primer titular se libra también en la publicidad y en los medios de comunicación de Catalunya.
Ambas entidades han intensificado al máximo de sus posibilidades su presencia pública. Se juegan mucho. Demasiado. El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, insistía en un encuentro reciente en Pimec que la OPA “no querida por sus clientes” es incapaz de convencer accionistas, patronales o sindicatos. Más de 30.000 empresas se han adherido ya al manifiesto de Pimec a favor de la competencia dentro del mercado bancario que coge el testigo de un informe sobre el impacto de la concentración BBVA-Sabadell. A la espera de la respuesta de la CNMC, la clave la tendrá una vez más la política catalana y española.

Siguiendo el camino del Sabadell o Criteria y la Fundació La Caixa, Applus también ha devuelto su sede social en Catalunya tras casi ocho años. El argumento que se da es el proceso de reestructuración de la empresa, pero lo cierto es que el efecto dominó de la operación vuelta a casa está siendo imparable. El último, si puede ser, que deje la puerta abierta para acoger nuevas inversiones y nuevas sedes sociales más allá de las que se fueron.
Quien se despide, por sorpresa de muchos, de la dirección general de Seat es el británico con pasaporte alemán Wayne Griffiths, que durante los últimos cinco años ha fortalecido la marca Cupra dentro del Grupo Wolkswagen con próxima parada en Estados Unidos. De nuevo, el relato está en disputa. Griffiths decía hace muy poco que este era “el trabajo de sus sueños” y el lugar donde se quería jubilar, pero ahora parece que lo deja por motivos personales y para emprender “nuevos retos”. Su último día de trabajo ha sido el 31 de marzo —todo muy deprisa— y no queda claro si es a petición propia o por presión ajena. En cualquier caso, ha dejado los mejores resultados hasta el momento de la historia de Seat.

A la cartera de Criteria Caixa, que es el primer hólding de inversión de España, hay que sumarle desde este mismo mes un par de operaciones nuevas, con la adquisición de un 20% de Celsa y otro 20% de Europastry.
Toda nueva inversión se acostumbra a pagar con otra desinversión o gestión del endeudamiento. La lista de participadas de Criteria es cada vez más larga (CaixaBank, Naturgy, Colonial, Telefónica, ACS, Veolia o Puig) y responde a la letra de un plan ambicioso liderado por Àngel Simón con la visita puesta en el año 2030.
Apuntaba el político Narcís Serra en un encuentro al Círculo de Economía que Barcelona tiene que recuperar el espíritu olímpico de hace treinta años y ser referente de digitalización o de colaboración público-privada en la escalera de vecinos de Europa. Conocedor como pocos de las interioridades de la política mayor, Serra coloca el Aeropuerto de Barcelona, el Barcelona Supercomputing Center, el Área Metropolitana o Rodalies como temas clave de la agenda económica.
La directiva Anna Gener fue todavía un paso más allá en un encuentro en el Colegio de Economistas y aseguró que “hasta que no se resuelva el problema de Rodalies, no se podrá solucionar el problema de la vivienda en Catalunya”. Todo está ligado y tiene que ver también con la falta de suelo, la relativa agilidad de los trámites urbanísticos o aquello de la confianza entre el sector público y privado.

Para acabar, me gustaría finalizar esta columna con algunas reflexiones surgidas después de un coloquio con los periodistas Màrius Carol y Ernest Folch en la escuela Aula:
- “El libro es la esperanza y el último regalo cultural de la humanidad”.
- “El periodismo es el esfuerzo de un colectivo para escribir la arquitectura de la actualidad”.
- “Los editores nos hemos dejado ganar la batalla por Google. Primero se quedaron las noticias y después, la publicidad”.
- “TikTok es el cerebro de la bestia”.
- “Se está perdiendo el espíritu crítico. El periodismo se está burocratizando y tiene miedo de molestar al poder”.
- “El caso Watergate hoy no sería posible”.
- “El incentivo de la verdad ya no da prestigio ni dinero en forma de ventas de diarios”.
- “No hay pausa ni tiempo de reflexión. Vivimos una pesadilla y espero que el mundo despierte pronto”.
- “Tenemos que seguir explicando la verdad de forma persistente. Tenemos que creer en el periodismo”.