Las firmas de lujo en las que diariamente se adentran centenares de turistas vuelven a situar a Paseo de Gràcia como la calle comercial más cara de España, categoría que logró en 2023 al superar a la madrileña Serrano. Las tiendas de moda, joyas, complementos, perfumería y tantas más sitúan la renta de la avenida barcelonesa en 261 euros por metro cuadrado.
Cerca de Paseo de Gràcia, Portal de l’Àngel se mantiene como una de las principales calles comerciales a nivel estatal, y como la cuarta en renta. Por detrás de Paseo de Gràcia se sitúa Serrano, con 257 euros por metro cuadrado, y la Gran Vía también de Madrid, con 255, a las que Portal de l’Àngel sigue de cerca con una renta de 253 euros por metro cuadrado.
Además, Paseo de Gràcia es una de las calles comerciales del segmento high street con menos espacios disponibles: sólo un 3% de sus locales están libres, mientras que la disponibilidad en la calle Serrano se sitúa en el 4%; en la Gran Vía, en el 6%, y en Portal de l’Àngel, en el 7%.
Con Paseo de Gràcia y Portal de l’Àngel a la cabeza, las principales arterias comerciales de Barcelona van más allá, y suman un total de 540 locales comerciales, con más de 273.700 metros cuadrados para retail. Del global, solo están libres 12 establecimientos, con 7.600 metros cuadrados.
De este modo, sólo un 2% de los locales de las principales zonas de Barcelona están disponibles, como se desprende de un análisis de JLL que ha radiografiado el retail español y que ha identificando más de 2.000 locales comerciales en Madrid y Barcelona. De estos, casi 1.200 se sitúan en las grandes calles comerciales y pertenecen a cerca de 800 propietarios, que los tienen arrendados a unos 700 inquilinos.
El análisis también ha puesto de manifiesto que existen diferencias entre los activos de Barcelona y los de Madrid, sobre todo en lo relativo al tamaño. Mientras que en Madrid un 4% tiene más de 2.500 metros, en Barcelona sólo alcanzan esta superficie un 1% de los locales. No obstante, en la capital catalana existen más establecimientos de tamaño medio: el 30% tienen entre 500 y 2.500 metros cuadrados, cifra que se sitúa en el 19% en el caso de Madrid.
Estas principales arterias siguen creciendo, tras un 2024 durante el que la cantidad de aperturas en las principales calles comerciales españolas creció un 9%, con 80 nuevos establecimientos. Según JLL, este crecimiento se vio impulsado por el turismo internacional, por el incremento de la confianza del consumidor y el papel clave de la tienda física en la estrategia de los operadores.
El bajo nivel de disponibilidad en high street y la escalada de las rentas “son indicadores claros de la reactivación del mercado y del atractivo de los principales ejes comerciales españoles para los operadores”, como defiende la directora de Leasing Advisory de JLL España, Adriana Gorri. En este contexto, la compañía de servicios inmobiliarios prevé que las ventas minoristas sigan creciendo a lo largo de 2025, lo que mantendrá al alza el impulso de las rentas en las principales arterias barcelonesas.